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Público objetivo: ¿A quién intenta llegar con este artículo? Adapte el idioma a ellos.


Bien, vayamos al grano. Estás aquí porque quieres escribir mejor contenido, ¿verdad? Contenido que *realmente* resuena con las personas a las que intentas llegar. Probablemente sea un especialista en marketing, propietario de una pequeña empresa, un blogger o incluso un profesional independiente que hace malabarismos con un millón de cosas a la vez. El tiempo es oro y debes hacer que cada palabra cuente. Ahí es donde entra en juego comprender a su público objetivo.

Olvídese de los consejos genéricos que lee en todas partes. No se trata de conocer datos demográficos como «mujeres de entre 25 y 34 años a las que les gustan los gatos». Eso es a nivel de superficie. Estamos profundizando más, centrándonos en la *psicografía*: sus valores, intereses, actitudes y estilos de vida. Piense en ello como una comprensión de sus motivaciones, no sólo de sus estadísticas.

Por qué conocer a su audiencia no es negociable

Imagina que estás intentando vender un café orgánico premium. ¿Se lo presentaría de la misma manera a un estudiante universitario con un presupuesto ajustado que a un ejecutivo ocupado que valora la calidad y la conveniencia? ¡Por supuesto que no! Sin embargo, muchas empresas cometen este error. Lanzan el mismo mensaje a todos, con la esperanza de que algo quede bien. Es como tirar espaguetis a la pared y esperar que formen una frase coherente.

Comprender a su público objetivo le permite:

Profundizando: Definiendo a su cliente ideal

En lugar de pensar en su audiencia como un grupo amplio, creemos una persona detallada: una representación ficticia de su cliente ideal. Dales un nombre, un trabajo, una familia, pasatiempos e incluso una historia de fondo. Cuanto más específico sea, mejor podrá adaptar su contenido a sus necesidades.

Aquí hay un marco para comenzar:

  1. Demografía: Edad, género, ubicación, ingresos, educación, ocupación. (Pero recuerda, ¡este es sólo el punto de partida!)
  2. Psicografía:
    • Valores: ¿Qué es importante para ellos? ¿Sostenibilidad, familia, avance profesional, creatividad, seguridad financiera?
    • Intereses: ¿Qué les gusta hacer en su tiempo libre? ¿Leer, viajar, cocinar, hacer deporte, hacer voluntariado?
    • Actitudes: ¿Cuáles son sus opiniones sobre determinados temas? ¿Política, tecnología, cuestiones sociales?
    • Estilo de vida: ¿Cómo es su rutina diaria? ¿Son profesionales ocupados, padres amas de casa o estudiantes?

  3. Puntos débiles: ¿Qué desafíos enfrentan? ¿Qué problemas están tratando de resolver? ¿Cuáles son sus frustraciones?
  4. Metas y aspiraciones: ¿Qué quieren lograr? ¿Cuáles son sus sueños y ambiciones?
  5. Fuentes de información: ¿De dónde obtienen su información? ¿En qué sitios web, blogs, plataformas de redes sociales o publicaciones confían?
  6. Comportamiento de compra: ¿Cómo toman decisiones de compra? ¿Son compradores impulsivos o investigan exhaustivamente? ¿Qué factores influyen en sus elecciones?

Digamos que vende software de gestión de proyectos. Su cliente ideal podría ser «Sarah, una gerente de proyectos de 32 años en una agencia de marketing. Es organizada, orientada a los detalles y apasionada por su trabajo, pero está constantemente estresada por los plazos y por hacer malabarismos con múltiples proyectos. Valora la eficiencia y la colaboración, y siempre está buscando formas de optimizar su flujo de trabajo. Lee blogs de la industria como ProjectManager.com y sigue a personas influyentes en la gestión de proyectos en LinkedIn. Está dispuesta a invertir en herramientas que la ayudarán a ahorrar tiempo y mejorar el desempeño de su equipo. desempeño, pero necesita ver evidencia concreta de su valor».

Ahora, piensa en cómo adaptarías tu contenido a Sarah. Puede crear publicaciones de blog sobre «Cinco consejos para administradores de proyectos para ahorrar tiempo» o «Cómo mejorar la colaboración en equipo con software de gestión de proyectos». Usted se concentraría en los beneficios que más le importan a ella: eficiencia, productividad y reducción del estrés. Utilizaría testimonios de otros directores de proyectos que hayan visto resultados similares. Y promocionarías tu contenido en LinkedIn, donde es probable que ella lo vea.

Herramientas y técnicas para la investigación de audiencias

Entonces, ¿cómo se recopila realmente toda esta información? Aquí hay algunas herramientas y técnicas que puede utilizar:

La clave es tener curiosidad, hacer preguntas y escuchar activamente lo que te dice tu audiencia. No haga suposiciones: deje que los datos guíen sus decisiones.

De la investigación a los resultados: implementar sus hallazgos

Una vez que haya reunido toda esta información, es hora de ponerla en acción. Aquí hay algunas maneras de implementar sus hallazgos:

Recuerde, comprender a su público objetivo es un proceso continuo. A medida que su negocio evoluciona y el mercado cambia, necesitará recopilar datos continuamente y perfeccionar su comprensión. Mantén la curiosidad, mantente adaptable y siempre pon a tu audiencia en primer lugar.

Conclusión

No se trata sólo de marcar casillas en una lista de control de marketing. Se trata de conectarse con personas reales, construir relaciones y, en última instancia, crear un negocio que proporcione valor genuino. Al invertir tiempo y esfuerzo en comprender a su público objetivo, estará bien encaminado para crear contenido que resuene, impulse la participación y alcance sus objetivos comerciales. Entonces, ¡sal, comienza a escuchar y comienza a conectarte!

Preguntas frecuentes

¿Con qué frecuencia debo revisar la definición de mi público objetivo?

Al menos una vez al año, pero idealmente con más frecuencia si lanza nuevos productos, ingresa a nuevos mercados o observa cambios significativos en su industria.

¿Qué pasa si tengo varios públicos objetivo?

Eso es perfectamente normal. Cree personas separadas para cada segmento de audiencia y adapte su contenido en consecuencia. Es posible que incluso necesites desarrollar diferentes estrategias de marketing para cada grupo.

¿Está bien hacer suposiciones sobre mi público objetivo?

¡En absoluto! Las suposiciones pueden llevar a una focalización inexacta y a un desperdicio de recursos. Base siempre sus decisiones en datos e investigaciones.

¿Qué pasa si no tengo presupuesto para costosas herramientas de investigación?

Existen muchas herramientas gratuitas o de bajo costo que puede utilizar, como Google Analytics, Google Forms y herramientas de escucha en las redes sociales. Concéntrese en recopilar datos cualitativos a través de entrevistas y conversaciones.

¿Cómo sé si mi contenido resuena con mi público objetivo?

Realice un seguimiento del tráfico de su sitio web, la participación en las redes sociales y las tasas de conversión. Preste atención a los comentarios, opiniones y reseñas. Si no ve los resultados que desea, experimente con diferentes enfoques.

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